El acto se desarrolló en el paseo recreativo.






En el marco del día internacional de la mujer, el ministerio de igualdad, género y diversidad de la provincia en conjunto con la comuna de Fortín Olmos, fueron los encargados de homenajear a todas las mujeres del distrito.

Fue en un acto que tuvo lugar a las 20,00 hs de este miércoles 08 de marzo, en el paseo recreativo, donde el principal objetivo fue homenajear a las mujeres que han dejado huellas y ya no están y a las que hoy siguen luchando ante las adversidades sociales y económicas.

En ese contexto, la asistente social de la comuna Marisa Figueroa, leyó las palabras alusivas, para continuar se descubrio una placa en homenaje a la mujer Olmeña, heredera de luchas silenciadas y resiliente en los sucesos históricos de un pueblo, descubrimiento que lo realizaron la Sra. Teresa Rodríguez, la funcionaria policial Vanesa Aguirre y la ex docente Ana María Armas de Rivas.

La jornada continuo con varios números artísticos y un cierre a puro baile con el show de Juanchi Banegas.

Homenaje a la mujer Olmeña por el Prof. Alexis Romero.

Hacer un homenaje a la mujer olmeña, implica en primer lugar reconocer el protagonismo y las luchas por la igualdad que acompañaron su accionar y templaron su carácter.

Muchas veces es necesario adentrarse en las raíces, buscar en el origen de nuestra historia aquella matriz que fortalezca nuestra identidad y nos hermane como pueblo. Por ésta razón mencionada, consideramos oportuno, en este día tan significativo, recordar a las primeras mujeres que recorrieron estas tierras. Aquellas recolectoras-cazadoras y valientes mujeres que supieron desarrollar un modo de vida en sintonía plena con el medio natural del cual formaban parte.

Cómo no mencionar a aquellas mujeres que se animaron a acompañar a los soldados durante las campañas militares contra las parcialidades guaykurú. Pocas en número, pero con una fortaleza inquebrantable muy digna de destacar. Ellas estuvieron presentes cuando el coronel Manuel Obligado junto al ingeniero Wysoki ordenó el trazado de una línea ofensiva de fortines que darían origen a nuestro pueblo en el año 1872.

Con el advenimiento de La Forestal podríamos decir que comenzó a forjarse la identidad de lo que hoy es la mujer Olmeña. Laboriosa, compañera y esposa de aquellos hacheros, carreros, boyeros, labradores y guincheros. Mujeres de otra época que supieron hacerle frente a situaciones muy adversas, ya que se encontraban subordinadas bajo un rígido sistema patriarcal que las dominaba hasta en su vida más íntima. Supieron a fuerza de trabajo y coraje sostener los núcleos familiares y por ende una incipiente comunidad que comenzaba a crecer y a cobrar un importante protagonismo en la zona.

Tras la retirada de la Forestal a comienzos de los años 60 se abre un nuevo capítulo en la historia de nuestro pueblo, donde la mujer olmeña va a jugar un rol preponderante en el seno de la comunidad. Ya no solo se ocupara de las múltiples tareas domésticas, y el cuidado de sus hijas e hijos, con todo lo que ello implica. A partir de esta etapa muchas mujeres comenzaron a realizar labores fuera de sus hogares y en diversas tareas, principalmente en actividades vinculadas al trabajo forestal y la agricultura.

Asimismo, comienza un proceso de luchas y empoderamiento que les permitieron tomar ciertas iniciativas, con voz y voto, como así también la lucha por el acceso a la educación superior y a la profesionalización en muchos rubros de la actividad laboral.

Cabe destacar en este sentido la verdadera epopeya llevada adelante por un grupo de mujeres encabezadas por Ana María Seghezzo, quienes en el año 1964 lograron fundar una cooperativa íntegramente constituidas por mujeres bajo el nombre "EL AROMO", una institución que permanece vigente hasta el día de hoy y que constituye un verdadero ejemplo y orgullo para nuestra localidad.

Con el retorno a la democracia en el año 1983, las mujeres olmeñas se sumaron a la actividad política y continuaron ampliando derechos, lo que les posibilitó tener acceso a ciertos ámbitos que en épocas pasadas les fueron negados. Como así también la posibilidad, producto de sus luchas, de estar al frente de instituciones, ser emprendedoras y tomar iniciativas con un considerable grado de autonomía.

Hoy, avanzado ya el siglo XXI, podemos afirmar, colmados de satisfacción y orgullo, que las mujeres olmeñas tienen un protagonismo preponderante en los diversos ámbitos de nuestra sociedad. Son laboriosas, autónomas y empoderadas.

Consideramos que no sólo es necesario honrarlas y reivindicarlas (en el día internacional de la mujer) por sus luchas, por su entrega y por todas las conquistas y derechos que han logrado en el trascurso de nuestra historia, sino también que es un deber de toda la ciudadanía acompañar y contribuir en sus luchas, para lograr definitivamente la igualdad de género y poner punto final a un sistema patriarcal que durante siglos las ha silenciado, sometido y oprimido.

A todas las mujeres olmeñas queremos decirles que son el pilar fundamental de nuestra comunidad y estamos sumamente orgullosos de todo lo que han construido, de lo que siguen construyendo y de las infinitas batallas libradas en medio de tanta adversidad.
MUJERES OLMEÑAS, GRACIAS, INFINITAMENTE GRACIAS.